En pleno corazón del barrio de Los Sapos se encuentra una cafetería que fácilmente podrías confundir con un simple bazar. Pero si te adentras, descubrirás Panalma, un lugar acogedor dentro de una preciosa casona, con una noble causa: otorgar becas para que más jóvenes con discapacidad intelectual puedan acceder a mejores oportunidades.
Panalma nació a partir de la asociación “Quiero Aprender por una Vida Digna”, cuya misión es la rehabilitación neurológica de niños, jóvenes y adultos con discapacidad intelectual. Su objetivo principal es generar becas para que más jóvenes con discapacidad intelectual puedan asistir a su taller laboral de gastronomía y continuar con sus estudios, demostrando que tienen las mismas habilidades y oportunidades que cualquier otra persona.
Así que, además de disfrutar de deliciosos platillos, con cada compra estarás apoyando la noble causa de esta cafetería. Su especialidad son los cafés, por lo que cuentan con un extenso menú de bebidas frías y calientes, que incluye cafés, tisanas, frapés, lattes, sodas italianas y bebidas saludables. Uno de los más pedidos es su espumoso capuchino, ideal para acompañar sus exquisitos postres. Nosotros tuvimos la fortuna de probar su tradicional pan de elote, que literalmente te sonríe al llegar.
Sin embargo, lo que ha cautivado a su público es la impresionante variedad de postres caseros. Tuvimos la suerte de probar sus waffles, decorados con fresas, arándanos, nuez y una enorme bola de helado de vainilla, la combinación perfecta para disfrutar de una tarde increíble.
Panalma está ubicada en la calle 6 Sur, número 309, en el Centro Histórico, y su horario es de lunes a sábado de 12:00 p.m. a 9:00 p.m., y los domingos de 1:00 p.m. a 9:00 p.m. (excepto los martes, cuando cierran). Los precios varían entre 35 y 148 pesos.
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