A partir de hoy, las escuelas de nivel básico y medio superior en Puebla deberán acatar la prohibición de la venta de comida chatarra dentro de sus instalaciones.
La medida, impulsada por las autoridades estatales en coordinación con la Secretaría de Salud, busca combatir la obesidad infantil y fomentar hábitos alimenticios más saludables entre los estudiantes.
Con esta regulación, queda restringida la comercialización de productos ultra procesados con altos niveles de azúcar, grasas y sodio, como refrescos, frituras y dulces.
En su lugar, se promoverá la venta de opciones más nutritivas, como frutas, verduras y alimentos con menor contenido calórico.
De acuerdo con datos oficiales, Puebla es uno de los estados con mayores índices de obesidad infantil en el país, lo que ha llevado a reforzar políticas de prevención en el entorno escolar.
Especialistas en salud han señalado que el consumo excesivo de comida chatarra es un factor determinante en el desarrollo de enfermedades como diabetes y padecimientos cardiovasculares desde edades tempranas.
En los próximos meses, se llevarán a cabo inspecciones para verificar el cumplimiento de la prohibición y evaluar su impacto en la alimentación de los estudiantes.
Con esta acción, Puebla busca marcar un precedente en la promoción de políticas de salud pública dentro del ámbito educativo.
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