Por Beatriz Rivera
A pocos días de las elecciones presidenciales en Ecuador, el candidato Fernando Villavicencio fue asesinato a balazos por presuntos sicarios mientras se encontraba en un mitin político en el centro norte de la ciudad de Quito.
Un vídeo fue difundido en redes sociales, donde se muestra a Villavicencio abordar un vehículo para, seguidamente, recibir tres impactos de bala en la cabeza. Los hechos sucedieron frente a una multitud, por lo que varias personas salieron corriendo para no ser víctimas del fuego cruzado entre los agresores y la policía municipal.
Tras el atentado, la Fiscalía del Estado informó que nueve personas habrían resultado heridas, entre ellos una candidata a asambleísta y dos policías. Además, añadió que detuvieron a un sospechoso que resultó herido durante el cruce de balas, sin embargo, momentos después anunciarían que falleció en la Unidad de Flagrancia en Quito.
El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, confirmó que el candidato fue asesinado y convocó de manera urgente al Consejo de Seguridad del Estado para evaluar lo sucedido. Cerró su mensaje en Twitter asegurando que: “El crimen organizado ha llegado muy lejos, pero les va a caer todo el peso de la ley”.
La Secretaría General de Comunicación de la Presidencia anunció que las actividades programadas para el 10 de agosto de 2023, en conmemoración al Primer Grito de la Independencia, se suspendieron por el asesinato.
Según el propio Villavicencio, él y su equipo habían recibido amenazas durante esta campaña electoral. Dichas amenazas estaban vinculadas con la banda Los Choneros y su cabecilla alias Fito. Antes también sufrió atentados, por lo que, desde su faceta como legislador, contaba con seguridad policial.
Por el momento, el director de investigaciones de la Policía de Ecuador, Alain Luna, ya inició con la investigación correspondiente para dar con los agresores.